Hay que reconocerlo, existen Empleados Tóxicos y colaboradores que no se ganan la simpatía de sus jefes, son realmente una pesadilla, pero a la vez son muy eficientes en sus funciones, y para eso, el liderazgo emocional es la respuesta para poder generar un equilibrio entre ambos extremos.
Cada día en las diferentes organizaciones existen aquellos colaboradores que ejercen una influencia negativa sobre los equipos de trabajo, no sólo perjudicando el desempeño, sino el interés y la participación de cada uno de los miembros de la empresa, a este tipo de personas se les denomina Empleados Tóxicos. Si bien, estos colaboradores son personas que lo largo de la jornada no demuestran simpatía y en algunos momentos se tornan insoportables debido a que se muestran arrogantes, recelosos y a la defensiva, critican y siembran la discordia allá por donde van; no significa que sean malos en su trabajo, de hecho, el profesor Dylan Minor de la Universidad de Harvard, dice que, en algunas ocasiones, los empleados tóxicos "suelen ser muy productivos porque los trabajadores excesivamente seguros de sí mismos pueden tener mayor éxito". ¿Entonces, como se puede lidiar con esta situación y no perderse en el intento?.
¿Qué debe hacer un Jefe para evitar tener empleados tóxicos?
Una de las tareas más importantes como jefe al trabajar con este tipo de colaboradores es imprimiendo liderazgo emocional; esto significa estar consciente de que sus pensamientos y sentimientos no debe afectar las relaciones laborales; si frases como “es que no lo aguanto”, “me pone furioso” están en el día a día, esto debe cambiar. Se debe reconocer que la ira, la frustración o la desconfianza es una reacción que nace de la persona y que sólo esta misma tiene el poder para hacerte sentir algo, es decir, hay que ser el dueño de sus emociones. Una vez controladas las emociones, se deben seguir las siguientes tres estrategias:
Estrategias para evitar empleados tóxicos:
- Acompañamiento: aunque suene contradictorio, si no existe afinidad con un colaborador, hay que pasar más tiempo con él. Es muy común tratar de evitarlo de todas las maneras posibles pero este solo sentirá más frustración pensando en que su jefe ni le dirige la palabra, ser líder es conocer a fondo a sus colaboradores desde lo personal hasta lo laboral; y gracias a esto, el jefe se acostumbrará a sus peculiaridades, lo que hará que se sienta más cómodo con ellas, y, por otro lado, podrá aprender qué es lo que no le gusta de este y así poder aprovechar ese conocimiento como fuente para motivarlo. Preguntas como “no hemos tenido oportunidad de conocernos más, cuéntame cuáles con las cosas más importantes que crees que debo saber de ti”, ayudarán para enriquecer ese conocimiento Jefe – Empleado, así como almorzar o visitar un cliente juntos.
- Conocer la raíz de sus comportamientos: La mayoría del mal comportamiento no tiene una intención destructiva, es autoprotección. Conocer las causas por las que un empleado se porte agresivo al contestar o tenga una mala actitud es importante para atacar la raíz de los problemas. Averiguar qué es lo que intenta proteger esta persona, si tiene problemas personales o económicos es el primer paso para empezar una nueva relación. Preguntas como “¿Qué te preocupa?” “¿Qué te ha hecho estallar?”, etc., permitirán conocer qué hay detrás de ese mal comportamiento y así tener una mejor visión de cómo motivarlos.
- Empoderar ideas o proyectos: trabajar con el empelado con quien no se tiene afinidad en un nuevo proyecto organizacional es la mejor oportunidad para tener un nuevo aliado. Si este colaborador es eficiente con mayor razón hay que exprimir lo mejor de este y que mejor dándole tareas y responsabilidades para que se empodere y su relación, tanto con la empresa y con el jefe, sea mas llevadera. Prestar atención a los aspectos positivos que los empleados tienen es un factor motivante para el éxito.
Por último, es claro que a los jefes no los contrataron para conseguir mejores amigos, pero si para liderar equipos de trabajo y mantener un buen clima laboral entre colaboradores para conseguir una mayor productividad empresarial.
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